GALLETAS DE AMARANTO

Hay que reconocer que, para preparar estas galletas se requiere bastante tiempo. Aunque después podrás guardarlas y comerlas en cualquier otro momento como un snack, y verás como habrá merecido la pena.

Estas galletas son muy ricas  en fibra, por lo que generan la sensación de saciedad. Además, si lo prefieres puedes añadirle nueces, piñones…

Ingredientes:

·        1 taza de harina de amaranto

·        2 cucharadas de proteína en polvo (opcional)

·        1 cucharadas de cacao

·        1/2 cucharadita de levadura

·        1 huevo

·        2 cucharadas de miel

·        1/8 de leche

·        1 cucharada de canela

·        Nueces o piñones al gusto

Elaboración:

1.      Si no tienes harina de amaranto, no te preocupes. Puedes batir el amaranto hasta obtener la harina de manera fácil y rápida.

2.     Para empezar la receta necesitarás un bol grande. Primero añadimos  todos los ingredientes secos. Que són la harina de amaranto, la canela, el cacao y la levadaura. Debes mezclarlos muy bien. Si deseas que las galletas sean más nutritivas, puedes agregarle proteína en polvo, este paso es opcional.

3.     A la mezcla de los ingredientes secos, se le agregará todos los productos líquidos. Primero, integra el huevo de manera envolvente y, posteriormente, incorpora la leche y la miel, hasta formar una masa homogénea.

4.     Por otro lado, coloca en el recipiente para hornear un poco de aceite y espolvorea con un poco de harina para que las galletas no se peguen. También, puedes usar papel de horno, según tu conveniencia.

5.     Con  el recipiente listo, harás bolitas con la ayuda de tus manos. Después las aplastarás muy cuidadosamente hasta formar las galletas. Si disponéis de moldes para galletas, es una buena opción utilizarlos, así seguro que los niños no se resistirán a probarlas. Luego, colocarás las galletas sobre el recipiente. Si quieres añadir frutos secos es el momento.

6.     Finalmente, colocarás la bandeja en el horno por 20 minutos, a 180 grados centígrados. ¡Listo!

Nota

Ojo con esta receta, pues puede resultar muy calórica. Puedes reducir su valor energético con pequeñas modificaciones, como por ejemplo: reducir la miel, el cacao que sea desgrasado, la proteína que sea de suero, la leche desnatada….